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El Encuentro Feminista de América Latina y El Caribe (EFLAC) tuvo su quinceava edición con la participación de un centenar de personas que movieron las fronteras de la región para hermanarse “frente a la tiranía y los retrocesos democráticos” bajo el sol de El Salvador.
Así manifiesta desde el inicio la declaratoria que dejaron como resultado los días de diálogo y articulación interseccional, intergeneracional e intercultural en las más de 130 actividades propuestas durante el encuentro desde el 22 al 25 de noviembre.
En este documento, que se expresa a viva voz como el grito puesto en las calles al cierre del EFLAC, se trazan las líneas principales por las que el movimiento feminista llama a la articulación y al diálogo en la región, estableciendo líneas de acción claras en un pacto transfeminista para una vida libre de violencias.
Desde CISCSA participamos de distintas actividades junto a compañeras de las organizaciones con las que articulamos desde Córdoba:
Los días 23 y 24 de noviembre en la Asamblea “Ciudades feministas resistentes y resilientes”, temática que se abordó por segunda vez la historia de los EFLAC y coordinamos junto a las compañeras de la Red Mujer y Hábitat de América Latina y El Caribe. La intención fue problematizar sobre las desigualdades, la devastación extractivista, el despojo y las violencias que fuerzan al desplazamiento de amplios sectores de la población a territorios urbanos de expulsión y segregación, siendo las identidades feminizadas las que vivimos los impactos de estos procesos.
El jueves 23 coordinamos el conversatorio "Construyendo feminismos populares desde la resistencia de los barrios", una propuesta coordinada junto a La Garganta Poderosa, el colectivo Agenda de los derechos de las mujeres a la ciudad y el Espacio de Género y Diversidades María de las Mercedes Gómez “Las Mechas”, con la idea de llevar desde Córdoba las experiencias de las organizaciones territoriales locales.
Esa misma tarde también nos encontramos en el conversatorio "Feminismo y democracia en América Latina y El Caribe", junto a las compañeras de la Articulación Feminista Marcosur (AFM).
Sin dudas, este encuentro enraizó las redes que nos sostienen, enriqueció los diálogos para hermanarnos en las luchas y los relatos entre los países de la región y reafirmó el potencial transformador del movimiento feminista que se manifestó en las calles de El Salvador el #25N al grito de:
¡Justicia para Beatriz!
Respeto al voto popular en Guatemala
Exigimos la no intervención militarización en Haití
Libertad para las presas políticas en Nicaragua
Nos solidarizamos con las feministas en Argentina
¡Queremos una Palestina libre!
Unidas, unides, resistiendo y avanzando, nos volvemos a encontrar en Haití en el próximo EFLAC.
La declaratoria se puede leer completa en sitio web de EFLAC
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