8 mujeres de 18 organizaciones feministas participaron de la Asamblea 2018 de la Articulación Feminista Marcosur, realizada en Río de Janeiro entre el 28 y el 30 de mayo.
Cronología de la Asamblea
El lunes, primer día de Asamblea, se conversó sobre los contextos nacionales de cada país y se debatió sobre la situación de América Latina en general. Como puntos a destacar se habló de la efervescencia del movimiento feminista, de la integración de jóvenes y adolescentes, de la presencia feminista en los movimientos sindicales, de la diversidad de feminismos en el continente y de ciertos logros legislativos. Como problemas generales se plantearon el avance de la derecha, el neoliberalismo, la violencia de género, la penalización del aborto en varios países y la diferencia entre el discurso político y las acciones gubernamentales.
Por la tarde se plantearon los desafíos más urgentes para la Articulación Feminista Marcosur, entre los que se discutió la relación de la AFM con la democracia, la incidencia en la agenda política, la importancia de conservar los avances en derechos y la necesidad de crear mensajes más simples.
También se hizo hincapié en la importancia de llevar a cabo acciones anti-racistas y de reafirmar la diversidad de mujeres y feminismos que integran la Articulación.
El martes el debate se centró en la trayectoria de la AFM, los desafíos analizados el día anterior y la respuesta a cinco cuestiones clave: cómo facilitar la participación de las organizaciones en las iniciativas de la AFM, cómo profundizar y avanzar en el debate político, cómo integrar e interactuar con más diversidad de feminismos, cómo mejorar los procesos de toma de decisión y cómo optimizar la comunicación interna.
En la mañana del miércoles se continuó con el trabajo del martes y se debatieron dos nuevos interrogantes: ¿Qué queremos que sea la AFM? y ¿Cuáles son los principales desafíos organizativos de la AFM?
Se coincidió en el deseo de fortalecer a la AFM como red feminista latinoamericana y en la necesidad de reconocer y celebrar su crecimiento regional. Se plasmó la idea de que la AFM debe ser una voz crítica en el movimiento feminista de América Latina, que reconozca y potencie su diversidad de voces internas. También se señaló la aspiración de generar mayor articulación entre los países que la integran y de democratizar ciertos procesos de toma de decisión, además de generar más espacios de interacción con otros sectores del feminismo.
En la tarde se trabajó en torno a los cinco ejes relacionados a la organización de la AFM que habían sido planteados el día anterior y se debatió especialmente sobre las formas de toma de decisión de la Articulación.
Finalmente, se procedió a votar las nuevas integrantes de la Coordinación Política. Se mantuvieron tres de las cinco mujeres que tomaron esta responsabilidad en el período anterior -Ana Cristina González (Colombia), Verónica Ferreira (Brasil) y Clyde Soto (Paraguay)- y se eligieron dos nuevas integrantes: Soledad Pérez (Argentina) y Liz Meléndez (Perú). Daphne Cuevas (México) fue electa como suplente.
La Asamblea terminó con un gran abrazo a Gina Vargas y Cecilia Olea (Perú), que culminaron su período en la Coordinación, y la foto final con los pañuelos de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito de Argentina.
Resistencias feministas en América Latina
Marielle Franco estuvo presente a lo largo de los tres días de Asamblea. Se le realizó un homenaje en la primera mañana y su imagen acompañó en carteles y pines a todas las mujeres.
El martes 29 de mayo, la Articulação de Mulheres Brasileiras y el Coletivo À Esquerda da praça, en conjunto con la Articulación Feminista Marcosur, llevaron a cabo un acto público en la Plaza São Salvador de Laranjeiras.
Participaron Ana Falú, de CICSA Argentina; Rocío Muñoz Flores, de Presencia y Palabra Mujeres Afroperuanas; Lucy Garrido, de Cotidiano Mujer Uruguay; Schuma, de la REDEH Rede de Desenvolvimento Humano Brasil; y Mónica Benicio, pareja de Marielle Franco y militante por los derechos humanos.