El feminismo convoca multitudes. Se instaló en la academia, en los barrios, en las organizaciones populares, en los movimientos sociales. En las calles de todo el mundo, en especial las de América latina. En este contexto, mujeres -y varones- de todos estos sectores colmaron las aulas de la Universidad Nacional de Córdoba, Argentina, para escuchar, debatir y pensar acciones en el marco del Seminario-Taller “Mujeres y ciudad: (in) justicias territoriales", que se realizó el 4 y 5 de mayo.
“Esta arremetida conservadora que estamos viviendo en América latina en particular pero en general en todo el mundo, que nos está llamando ‘feminazis’, que está volviendo a temas que pensábamos que habíamos ganado en la agenda feminista, nos tiene que mantener alertas; unidas en algunos puntos de agenda, ese tiene que ser nuestro pacto feminista a pesar de nuestras diversidades, disidencias, que son bienvenidas”. Con esas palabras, abrió el encuentro Ana Falú, directora ejecutiva de Ciscsa, organizadora del encuentro junto a la Articulación Feminista Marcosur con el apoyo de la Universidad Nacional de Córdoba, Cepal, HIC y Red Mujer y Hábitat.
Ciscsa es una organización con 30 décadas de trayectoria, pionera en el tema de mujeres y ciudad, mujeres y territorio. “No solo en Córdoba, no solo en Argentina; hemos sido pioneras en Latinoamérica y en articularnos en otras regiones en un tema que era nuevo, de innovación para la agenda feminista y también para la agenda social, para las políticas públicas a favor de los derechos de las mujeres”, continuó Falú.
“No somos plenamente personas”
Más tarde durante el día, la antropóloga y referente feminista Rita Segato planteó que las ciudades constituyen ese espacio que nos da las claves para entender qué es lo público. Y manifestó que, al espacio público, “las mujeres lo habitamos de manera no plena” y que esto nos da la pauta de la manera en la que habitamos el Estado, es decir, “con el mismo constreñimiento que habitamos las calles de la ciudad, en donde nuestras tranquilidad no existe”.
Así, expresó que existe un discurso que plantea que todos somos ciudadanos pero que, en realidad, esa ciudadanía es ilusoria.
“Las mujeres no somos plenamente ciudadanas, ni plenamente personas”, agregó Segato. “¿Cómo pensar las ciudades desde una perspectiva de género, el espacio urbano que habitamos cotidianamente como lugares de más inclusión? ¿Cuáles son los desafíos y prioridades para avanzar en la autonomía de de las mujeres vinculado a los cuidados de las personas dependientes?”, fueron las preguntas a modo de disparadores que planteó al inicio de su exposición por Olga Segovia, consultora de la División de Asuntos de Género de CEPAL, e integrante de la Red Mujer y Hábitat LAC.
Durante los dos días de interacciones y debates, hubo espacio para conferencias magistrales de referentes internacionales, así como instancias de diálogo y reflexión crítica en clave feminista sobre el derecho de las mujeres a la ciudad, la planificación urbana desde el género y las experiencias territoriales de resistencia donde las protagonistas fueron las organizaciones sociales y de mujeres de Argentina y de la región.